Depósito de Agua reforma de un antiguo depósito de agua, madrid, 2007
client: City Council Madrid
type: architectural design competition
area: 1200m2
location: fuencarral, madrid
year: 2007
project: ben busche, isabel barbas team: alonso frolich, philip baumann
status: competition
memoria descriptiva
El antiguo depósito está ubicado en un lugar hermoso dentro del Parque Urbano de Fuencarral, un pequeño bosque en lo alto de la colina con vistas sobre los tejados de Tres Olivos con la sierra y el horizonte noroeste como telón de fondo. En la clara geometría y elemental materialidad de sus muros reside una fuerza tectónica impresionante.
El programa prevé la instalación de dos pistas deportivas de squash en el interior del depósito, dotación que parece haberse propuesto principalmente por su facilidad de instalación y conveniencia de dimensiones. Sin embargo, nos preguntamos si no sería una dotación dirigida hacia un grupo de usuarios muy específico, poco adecuada para crear un foco de atracción en el barrio y difícilmente apta para poner en valor la singularidad de la construcción existente del depósito.
Teniendo en cuenta que el barrio está necesitado de instalaciones deportivas y que además la propuesta debe enfocarse hacia la creación de un foco de atracción para el mismo, proponemos tres actuaciones complementarias con la posibilidad de realización y gestión en conjunto o por separado:
Proponemos la instalación de un campo deportivo multiuso (42 x 21m) para la práctica de deportes de fútbol, baloncesto y voleibol en una zona plana y libre de arbolado situada al suroeste del depósito. La gestión y el mantenimiento de dicho campo estarían a cargo de la empresa adjudicataria de la dotación hostelera tal como descrito en las bases del concurso. Se prevé una pequeña caseta cercana al campo para almacenar los elementos auxiliares (porterías, redes, etc.).
Se proyecta un sencillo pero delicado volumen cristalino ubicado en un pequeño claro al suroeste del depósito. La posición de la pieza aprovecha la topografía natural del terreno para organizar las entradas y ubicar las zonas de restauración con vistas y a la vez protegerlas del tráfico rodado de la carretera. Entre los árboles y en la cubierta del nuevo volumen, se crean de forma natural una serie de plataformas para uso como terrazas de verano.
El depósito, con sus gruesos muros de contención de fábrica, se aprovecha para insertar un programa estrechamente relacionado con su función hidráulica original: unos baños termales. Dichos baños representan una explotación comercial mucho más atractiva que el uso previsto de pistas deportivas de squash. Es importante destacar que el uso descrito tiene capacidad de convertirse en foco de atracción no sólo para el propio barrio sino para los barrios adyacentes e incluso para la ciudad de Madrid de forma genérica.
De manera imaginaria, el volumen del antiguo depósito se rellena con una masa en la que flotan vacíos que constituyen los espacios transitables. Cada espacio está pensado en relación a su percepción atmosférica con el objetivo de crear una serie de arquetipos sensoriales relacionados con la temperatura del agua que se va experimentando de manera secuencial (frío/ caliente/ templado/ vapor etc.). Prácticamente todas las estancias llevan iluminación cenital en cubierta de manera que la estructura existente queda intacta en su configuración actual. El cierre material del volumen se realiza de manera pragmática aprovechando la esquina derruida para ubicar el acceso y relacionar visualmente las estancias de descanso con el parque y el entorno exterior. La cubierta se utiliza para crear un área de descanso exterior situado entre las copas de los árboles.
Entendemos nuestro proyecto como la interrelación de tres piezas arquitectónicas diferenciadas actuando como catalizadores de la vida pública en el parque. El contexto topográfico de la colina boscosa queda matizado con la inserción sutil de tres nuevas plataformas. Los caminos, casi todos ellos ya existentes y configurados naturalmente por el paso adaptándose a topografía y arbolado, conectan las piezas arquitectónicas con el resto del parque y forman parte integral del diseño.
La materialidad que adquiere el volumen cristalino del restaurante con el reflejo de la vegetación circundante sobre el entramado de sus fachadas y su posición semienterrada a los pies del depósito hacen que se entienda como una pieza atmosférica complementaria al hermetismo iconográfico del depósito con el propósito de revelar y aumentar las cualidades de cada elemento.